Un curso de reanimación cardiopulmonar (RCP) básico y en el que también se incluya el protocolo para uso de desfibriladores automáticos es una formación muy positiva. Simplemente es algo necesario,

Teniendo en cuenta que conocer las maniobras de RCP, para saber lo que hay que hacer y lo que no hay que hacer, la utilidad de conocer las técnicas de RCP viene dada por lo importante de una actuación temprana, teniendo en cuenta que siempre es más perjudicial no intervenir, y dejar que pase el tiempo, que actuar. Por eso creo que no solo se debería extender los cursos de reanimación a todo el personal sanitario, sino a la población general.

·        En Argentina, la enfermedad coronaria es la primera causa de muerte.

·        En Argentina, ocurre un episodio de paro cardiorrespiratoria (PCR) cada 20 minutos.

·        El 75% de las PCR ocurre en el domicilio. El 16% en un lugar público y en 9% en otros entornos.

·        En 60% de las PCR son presenciadas.

·        Cada minuto sin actuar después de una PCR disminuye de forma significativa las posibilidades de supervivencia.

·        Los equipos de emergencias tardan de media unos 10 minutos en llegar a la situación de emergencia.

Solo con el hecho de que el 60% sean presenciadas, ya nos hace ver la importancia de que haya una amplia red de personas que conozcan este tipo de técnicas. En el personal sanitario, por tratar con personas que se supone que tienen una patología, es básico que se sepa responder ante emergencias y conocer las técnicas de RCP y uso de los DEA. Si seguimos analizando los datos, vemos que el 75% ocurren en el domicilio. Esto quiere decir que no es solo importante que los sanitarios sepan estos protocolos, sino que cualquier persona debería conocer este tipo de actuaciones, ya que la intervención rápida ante una PCR en el hogar hace viable que los equipos de emergencia puedan actuar y salvar a la persona una vez que se presenten (unos 10 minutos de media).

Si en esos 10 minutos se realizan técnicas de forma correcta, aumentaremos las probabilidades de supervivencia de la persona. Si no, el equipo de emergencias solo podrá acudir para certificar la muerte y tratar de salvar los órganos. . Sin embargo, fallan los primeros eslabones de la cadena de supervivencia.

La cadena de supervivencia consiste en cuatro eslabones que salvan vidas después de un PCR:

1.     Avisar a emergencias

2.     Iniciar el masaje cardíaco

3.     Desfibrilación (con DEA)

4.     Atención por los servicios de emergencias

Si concentramos toda la actuación en el punto 1 (avisar a emergencias) y el punto 4 (esperar a que acudan), estamos perdiendo un tiempo muy valioso, que es vital para salvar una vida. En el curso se explica el protocolo y se repite y practica una y otra vez, para quitar dudas, miedos e inseguridades. Detalles importantes como practicar la RCP sobre una superficie dura, como el suelo, nunca sobre una cama, despejar bien las vías respiratorias (maniobra frente-mentón), iniciar el masaje cardíaco con la técnica correcta y mantener el masaje de calidad: 100 compresiones por minuto, a ritmo de 30 compresiones y 2 ventilaciones, donde cada compresión deprima el esternón al menos 4-5cm, relevándose cada 2 minutos si hay varias personas para dar el masaje.